CAMINANDO JUNTAS Y JUNTOS HACIA EL BUEN TRATO por Elisa Álvarez Fernández*
Con motivo de la celebración del Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer (el 25 de noviembre), declarado por la Asamblea Nacional de la ONU desde 1999, en el C.P. “Príncipe de Asturias” hemos realizado diversas actividades durante la semana.
Se trata de una campaña de sensibilización con todo el colectivo: alumnado, profesorado y familias. Charla, reflexión, información, participación en diversas actividades, cuentos, foto conjunta sacando tarjeta roja al maltrato,...
Mujeres y hombres aprendemos desde pequeñas y pequeños formas diferentes de estar en el mundo, de expresarse verbal y físicamente. Aprendemos e interiorizamos los valores, actitudes, formas de ser y comportamientos que corresponden a mujeres y varones, la identidad de género.
Aprendemos en la familia, no sólo escuchando mensajes, sino observando y copiando modelos. Pero también aprendemos en la escuela, de los medios de comunicación, la televisión, los cuentos, los videojuegos, las películas, en la calle,,...
En general, en las niñas se potencia, la cultura del cuidado, del afecto, la comprensión, la sensibilidad, la ternura, mantener la armonía en las relaciones,... Las expresiones de enfado, rabia, agresividad en las mujeres siempre se han reprimido y sancionado socialmente.
Sin embargo, se considera natural que los niños sean brutos. La masculinidad ha estado unida al desarrollo de la fuerza física, la conquista, el dominio, la acción,... Los varones tenían que ser valientes, fuertes, osados, temerarios, siempre dispuestos a pelear y defender su hombría. Y se sanciona al varón que es sensible, o llora o expresa sus sentimientos.
Todavía en este siglo continua vigente esta cultura. Seguimos transmitiendo los viejos roles y estereotipos. Debemos ofrecerles nuevos modelos de masculinidad y feminidad en los que quede patente que somos diferentes, cada persona es única, pero somos iguales en derechos y responsabilidades. Tenemos que luchar para que esta transmisión basada en la diferencia entre sexos no llegue a transformarse en desigualdad.
Nuestra sociedad ha cambiado a mejor y a peor, ya que todos los días se crean nuevas formas de dominación. Si queremos que desaparezca la violencia es necesario que no se perpetué el esquema dominación/sumisión en todos los niveles.
El mal trato y el buen trato son dos polos de un mismo eje. La violencia forma parte de nuestra vida cotidiana. Las relaciones de maltrato afectan a todas las personas. A veces nos automaltratamos, o maltratamos, o nos dejamos maltratar.
Para poder crear una sociedad no violenta y que fomente las relaciones de paz, hemos de poner el énfasis en el buen trato. Trabajar por el buen trato. Hacia nosotra/os misma/os y hacia los/as demás. Hemos de entender nuestras emociones y aprender a controlarlas y canalizarlas, aprender a pedir lo que deseamos y a respetar el sí o el no de otra persona, a decir no a lo que no nos guste; aprender a relajarnos, saber respirar; valorarnos y valorar a las demás personas; respetar nuestro propio cuerpo y nuestra vida; respetar a las otras personas en sus diferencias; crear vínculos solidarios, afectivos y equitativos; aprender a vivir con autonomía, a ser amables, a agradecer, a sonreír; disculparnos cuando cometemos errores; poder llorar o expresar nuestros miedos sin sentirnos por ellos menos personas; saber escuchar,...
No podemos cambiar a nadie. Cada cual cambia lo que quiere y lo que puede en cada momento. Y tampoco se pueden cambiar las mentalidades de un día para otro, pero poco a poco se pueden debilitar los prejuicios mediante una labor de sensibilización, información y educación. Fomentar el no sexismo, el respeto , la tolerancia, la igualdad, la libertad, ...en fin, la dignidad de la persona, es tarea de todas y todos.
Os deseamos BUEN TRATO! Y que disfrutéis de la vida.
* Representante de Igualdad del Consejo Escolar del Centro.
